Esta película prometía mucho en los trailers que presentaba, escenas de acción con impactantes efectos especiales, actuaciones memorables y una buena historia, además de estar dirigida por Yimou Zhang un director respetable en cuanto al género de acción, lamentablemente casi nada de lo que promete se ve reflejado en el filme.
Comenzamos con la trama, que nos narra la vida de un mercenario William Garin (Matt Damon), quien junto con su mejor amigo Pero Tovar (Pedro Pascal), van en busca de pólvora negra, pero son tomados prisioneros por soldados chinos. Son trasladados a La Gran Muralla, donde descubren que el mundo se encuentra al borde de la extinción debido a una amenaza que va más allá de su comprensión, los taotie, monstruos que surgen de una montaña verde por montones, cada 60 años amenazan la muralla para poder alimentarse. Para su fortuna ambos demuestran su destreza en combate, logrando ganar la confianza y el respeto de los guerreros de la Orden Sin Nombre.
Algo que caracteriza a Yimou es el empoderamiento que da a sus personajes mujeres, nos presenta a la comandante Lin Mei, interpretada por Tian Jing, una combatiente experta que desde niña se ha entrenado para proteger la gran muralla y que tras la muerte del general a cargo, heredara la responsabilidad de resguardarla.
A pesar de haber seis escritores involucrados, los personajes carecen de profundidad, aunque intentan justificar sus motivaciones e historia a partir de unos breves diálogos, cuando lo hacen la película se vuelve lenta.
Algo que si debemos destacar a Yimou es el uso de una paleta de colores impresionante y que consigue algunas secuencias de acción muy bien realizadas. Pone gran énfasis en las tradiciones chinas, por ejemplo, la escena del funeral del general y el cielo iluminado por globos de cantoya, además de las armaduras y todo lo que implica vestuario.
La gran muralla se queda corta en comparación con otros trabajo que nos ha mostrado su director, tal es el caso Héroe (2002), una de las películas referenciales de su carrera. Algo que nos da mucha alegría es el inicio de una relación fílmica entre China y Estados Unidos.
En conclusión, La gran muralla es una película más de acción, con nada sorprendente, pero si lo que buscas es solo pasar un buen rato, ya está en cartelera.