Actrices mexicanas se han sumado al movimiento #MeToo,relatando las ocasiones en las que fueron víctimas de abuso sexual en la industria del cine y la televisión.
El pasado lunes 19 de febrero, Karla Souza, actriz y modelo mexicana, reveló que un director de cine, cuyo nombre no mencionó, la violó durante la filmación de una de las primeras películas que protagonizó.
De acuerdo con la actriz, durante la filmación de la película ella fue hospedada en el mismo hotel que el productor de la película, y éste se presentaba por las noches en su habitación para hablar con ella sobre supuestas ideas para las escenas en las que participaba.
“Esto no sucedió solo una noche, llegó a pasar varias noches y la noche en que yo decidía no abrirle la puerta me la cobraba: decidía no filmar mi escena o me empezaba a humillar frente a los demás”, contó.
La actriz relató que, después de más de un mes “del uso total de su poder”, el director la besó, la tocó de formas en las que ella no estaba de acuerdo y la violó.
“Estaba recién empezando mi carrera, cuando se presentó uno de estos productores que empiezan a manipularte con que ‘tú me debes una’. (…) Obviamente yo lo estoy diciendo de una forma, pero es mucho más relajado y más normal, van llegando estas semillas, que son focos rojos que yo, en ese momento, no tenía la educación para saber lo que estaba haciendo esta persona”, dijo Souza en entrevista con Carmen Aristegui.
Paola Nuñez, actriz que ganó fama realizando telenovelas con TV Azteca, relató con Carmen Aristegui para CNN que fue víctima del “terrorismo psicológico” de un director de cine que la acosó e hizo tomarse fotos desnuda, aunque “nunca fue algo directo; él nunca intentó tocarme, nunca lo propuso y por tanto yo no estaba convencida de que él me estaba acosando sexualmente, y como no estaba segura, permití el acoso por mucho tiempo”.
La actriz contó que, después de filmar una telenovela “muy exitosa”, hizo un cásting y obtuvo un personaje en una película, lo que consideró la “oportunidad de su vida”.
Sin embargo, dijo, el director pronto comenzó a humillarla diciéndole que sus compañeros de filmación no la consideraban una buena actriz, ni que estuviera guapa y en algunas ocasiones llegó a pedirle fotografías de su cuerpo, argumentando que tenía que verla así porque la película que filmaban tenía escenas de desnudos.