LEYENDA: El Charro negro en bicicleta

Personajes que se. volvieron leyenda en la ciudad de Puebla.
En la década de los cincuenta del siglo XX Hubo un personaje por demás singular alto muy delgado pero de cuerpo atlético montaba en una bicicleta vestido de negro
Pantalón vaquero y camisa de manga larga con un paliacate rojo al cuello y su sombrero texano negro también.
En esa época no existía la variedad de antojitos y botanas que actualmente existen empaquetadas y a la disposición del antojadizo, los antojos eran semillas de calabaza ( Pepitas), tostadas en comal , huesitos de capulín con sal, habas fritas, garbanzos con chile , pinole, y muy pocas cosas más.
Nuestro personaje tenía un chiquihuite adaptado a su bicicleta con piedras calientes al fondo y las semillas envueltas en una manta encima lo que las hacía semillas tibias y muy sabrosas para “Botanear”, su venta era muy singular llegaba a una esquina y gritaba a todo pulmón PEPITAAAAAAAAAASSS!
Mientras cruzaba la calle a toda velocidad al llegar a la otra esquina daba vuelta y a pedaleo lento regresaba a la esquina que acababa de pasar y volvía a gritar PEPITAAAAAAAASS! Se bajaba de la bicicleta y la llevaba a media calle , los vecinos que ya lo esperábamos nos arremolinábamos para que nos surtiera y al terminar la demanda en esa calle continuaba su camino repitiendo la operación calle por calle.
Era muy famoso y vendía mucho alguna vez le pregunté que si terminaba el chuquihuite? Y me dijo
SI! , siempre termino antes de las 6.00 P. M.
Haciendo cuentas de lo que valía la medida ( un botecito de chiles), sacaba buen dinero diariamente.
Porque terminaba antes de las 6.00 de la tarde?.
Además de que ya no tenía nada que vender se iba corriendo al rastro municipal en la calle 7 Oriente entre la 14 y 16 Sur actualmente la estación de policía, y empezaba a torear las reses que se sacrificarían esa noche!, tenía su público era muy famoso por sus faenas y por una ceremonia que realizaba cuando empezaba la matanza , cuando colgaban la res o cuando se encontraba en el piso le hacían un corte en el cuello a la res ,supongo en alguna vena principal porque salía un chisguete de sangre y ponía su taza de peltre a que se llenara y detrás de él muchos matanceros, decían que era la causa de su vitalidad ????
La cosa es que un día desafortunado , una res lo mato de una cornada!.
Su muerte fue muy sonada y muy sentida ya que gozaba del aprecio y simpatía de la Puebla que recorría diariamente en su bicicleta , el Charro de Negro sin lugar a dudas un personaje en la historia de nuestra Puebla de mediados del siglo XX.
Información obtenida de relatos verbales por vecinos de la tercera edad que tuvieron la fortuna de conocerlo en un fragmento de su ruta de la calle Reforma a la 19 Poniente sobre la calle 3 Sur!